Descripción del proyecto
El contrato debe comenzar con una descripción detallada del proyecto, incluyendo el tipo de construcción, la ubicación y las especificaciones técnicas. Esto ayudará a evitar malentendidos y garantizar que ambas partes estén de acuerdo con los términos del proyecto.
Plazos y fechas de entrega
El contrato debe establecer un calendario claro y realista para la finalización del proyecto, incluyendo fechas de inicio y finalización. También es importante establecer plazos para hitos específicos, como la finalización de la estructura, la instalación de sistemas eléctricos y de plomería, y la finalización de acabados.
Costos y pagos
El contrato debe incluir una lista detallada de los costos asociados con el proyecto, incluyendo materiales, mano de obra y cualquier otro gasto. También es importante establecer un calendario de pagos, incluyendo una cantidad de depósito inicial y los montos que se pagarán en cada etapa del proyecto.
Responsabilidades y garantías
El contrato debe establecer claramente las responsabilidades de ambas partes, incluyendo la responsabilidad por cualquier daño o retraso en el proyecto. También es importante incluir garantías para el trabajo realizado, como una garantía de calidad para los materiales utilizados y una garantía de trabajo para la mano de obra.
Procedimientos de cambio de orden
El contrato debe establecer procedimientos claros para cualquier cambio en el proyecto, incluyendo cambios en el diseño, los materiales o el calendario. Es importante que ambas partes estén de acuerdo con cualquier cambio antes de que se realice.
Resolución de conflictos
El contrato debe incluir un proceso para la resolución de conflictos, en caso de que surjan problemas durante el proyecto. Esto puede incluir la mediación o el arbitraje, en lugar de la litigación en los tribunales.